Los jugos hechos de frutas y verduras naturales sirven como fuente de ácidos orgánicos, antioxidantes y minerales. Su uso constante mejora el metabolismo, ayuda a limpiar toxinas y toxinas y normaliza el colesterol en la sangre.
El uso de jugos frescos y jugos es inaceptable para algunas enfermedades. El exceso de jugo en la dieta puede tener un efecto negativo en el tracto digestivo y el hígado.